Las mamás estamos diseñadas para preocuparnos cada vez que nuestro bebé comienza a llorar y hacemos hasta lo imposible para que se calme (aunque no siempre lo logramos). Estos tips te ayudarán para que tu bebé deje de llorar.

Lo primero que debes hacer es aprender a conocer sus necesidades y a reconocer su agenda de llantos para que no entres en pánico. Cuando ya tengas esto dominado es hora de olvidar la desesperación y tomar su llanto con naturalidad, recuerda que el estrés incluso podría perjudicar tu salud.

¿Por qué llora mi bebé?

Un bebé recién nacido explota en llanto ¡por todo! Pero ponte en su lugar: ha dejado de estar dentro de tu vientre y todas las sensaciones son nuevas para él. Puede llorar porque tiene hambre o por cólicos estomacales, por frío o calor, por sueño o por cansancio, por miedo o simplemente porque se siente solo.

Con el tiempo, sabrás identificar las causas del llanto y la manera de calmarlo, ya sea dándole de comer o con un masaje en la barriguita, tapándolo o descubriéndolo, con una sesión de apapacho, un arrullo o solo con hablarle.

Conforme pasan los meses, algunos bebés dejan de llorar con tanta frecuencia (y otros quizá no), pero no te preocupes, esto depende de su temperamento natural. No es recomendable dejarlo llorar en la cuna, aunque esta decisión es personal y cada mamá sabe reconocer cuando su bebito necesita algo.

La clave está en conocer los hábitos de tu bebé. Por ejemplo, si llora después de comer, seguramente es un cólico que se resuelve con un masajito o un cambio de pañal. Si tiene las manos frías es porque necesita abrigo y, si suda, seguramente es porque quiere desabrigarse.

Tips para que tu bebé deje de llorar

  • Mantén la calma. Toma en cuenta que llorar es parte de ser bebé, no explotes cada vez que no sepas las causas de su llanto. No pasa nada si tardas un poco en calmarlo, lo importante es que estás ahí para brindarle protección y seguridad. Tú también eres importante y mantener el control es parte de ser una gran mamá amorosa, recuerda que también los bebés sienten tu estrés y eso en vez de relajarlos, puede irritarlos más.
  • Entra en el ritmo de tu bebé. ¿Cuánto tiempo después de comer necesita un pañal?, ¿cuántas veces al día llora porque necesita aire?, ¿a qué hora necesita dormir?, ¿cada cuánto tiempo despierta y se siente solo? ¿Qué lugar le gusta y cuál no?, ¿qué ropa le parece incómoda en qué momento del día?, etcétera. Pon atención y verás que hay constantes. Esto te ayudará a buscar a un especialista cuando su llanto no tiene explicación durante su ritmo diario.
  • Utiliza ruido blanco. En esta nota te contamos todas las ventajas sobre esta opción. El ruido blanco es un sonido constante y con frecuencias al mismo volumen tiene la característica de calmar y relajar a tu bebé ya que ayuda a reducir los ruidos que lo rodean permitiendo crear una especie de aislamiento sonoro.
  • Abrázalo. Tu calor, tu olor y cercanía pueden calmarlo. También puedes utilizar la técnica “The Hold” del pediatra Robert Hamilton que promete milagros:
  1. Toma a tu bebé y pon sus brazos en forma de cruz sobre su pecho. Asegura la posición colocando tu mano sobre ellos.
  2. Coloca al bebé en un ángulo de unos 45 grados, mientras con la otra mano tomas el pañal.
  3. Muévelo suavemente de un lado a otro y hacia arriba y hacia abajo.

Si no ha funcionado, busca alguna otra alternativa, como las que vienen en esta página.